
¿QUÉ PASA en tu cuerpo CUANDO DEJAS DE ENTRENAR?
Dr. David Castro Coronel, Médico cirujano y diplomado en Nutrición y Alto Rendimiento.
El ejercicio físico es fundamental para mantenerse saludable y para prevenir el desarrollo de patologías crónicas y complejas. Cuando se abandona el hábito de entrenar, suceden en el cuerpo una serie de cambios fisiológicos. Por ejemplo, según desciende el nivel de actividad física, también disminuye la capacidad de los tejidos para captar glucosa. La translocación de los transportadores GLUT4 a nivel muscular también será menor, y el cuerpo tendrá una ineficiencia por parte de la insulina.
Inflamación
Una de las consecuencias más conocidas de abandonar el entrenamiento es la inflamación. Esto sucede porque la resistencia a la insulina se debe compensar con una mayor síntesis de la hormona para regular las glucemias. El aumento en la demanda de esta hormona provoca una situación de estrés y de inflamación crónica en el organismo.
Como se puede comprobar, el impacto fisiológico de dejar de entrenar es importante, y no hay manera de compensarlo por medio de la dieta a medio plazo.
Pérdida de músculo
Por culpa del desuso o inactividad muscular, se reduce la síntesis proteica en el músculo esquelético. Esto se debe a la falta de estímulo mecánico y a una menor eficiencia de la insulina, dos activadores de las rutas anabólicas. Como consecuencia, el organismo en general se volverá menos funcional.
Aumento de tejido graso
Al reducirse el volumen de masa muscular, el gasto energético disminuye. En estos casos, por lo general, se desequilibra la balanza a favor de la ingesta, experimentándose una importante ganancia de peso graso. A esto también se pueden sumar problemas en la diferenciación de los adipocitos.
Alteración hormonal
Una acumulación excesiva de grasa visceral, junto con la reducción de la masa muscular, da como resultado una alteración del entorno hormonal. En consecuencia, la testosterona puede verse reducida provocando que todos los problemas previamente mencionados, se agraven aún más.
Enfermedades
Como se puede comprobar, el impacto fisiológico de dejar de entrenar es importante, y no hay manera de compensarlo por medio de la dieta a medio plazo. La homeostasis se altera y esto deriva en mayor riesgo de contraer enfermedades, además de cambios epigenéticos.
La solución para prevenir todos estos problemas de salud, es no abandonar el entrenamiento nunca. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá! Y sobre todo, es importante darle prioridad al trabajo de fuerza. No te llevará mucho tiempo y los beneficios son innumerables cuando el planteamiento es bueno.